Ola de calor
La definición más amplia de ola de calor es un periodo de tiempo anómalamente caluroso. Se trata por tanto de un fenómeno meteorológico extremo. Corresponde a una masa de aire con temperatura muy elevada para dicha zona geográfica, suficientemente extensa, que suele durar entre unos días y unas semanas.
En nuestro España, la Agencia Estatal de Meteorología especifica aún más: una ola de calor se da cuando, al menos durante tres días consecutivos, al menos en el 10% de las estaciones consideradas se registran máximas por encima del percentil del 95% de su serie de temperaturas máximas diarias de los meses de julio y agosto del periodo entre 1971 y 2000.
La elección de esos meses reside en que julio y agosto suelen ser los meses más cálidos. Una vez calculado el percentil 95% de la serie, se localizan dentro del intervalo de tiempo considerado, el 5% de los días más cálidos y por último se toma como temperatura umbral, la más baja de las máximas registradas en esos días.
Sin embargo, hay otras definiciones, como la que hace la Organización Meteorológica Mundial: Es ola de calor cuando, durante más de cinco días consecutivos, la temperatura máxima diaria excede en 5ºC a la temperatura máxima media.
Características diferenciadoras de ola de calor
No siempre que se den episodios de calor extremo, se pueden definir como ola de calor. Tal y como indica su definición en España, deben cumplirse los criterios de intensidad, extensión y duración.
El término ola de calor depende de la temperatura media para el período en cuestión considerada “normal” en la zona, así que una temperatura que en un clima cálido se considera normal puede catalogarse como una temperatura propia de ola de calor en otro lugar del planeta con un clima más templado.
Causas que originan una ola de calor
Los siguiente factores o la combinación ellos pueden dar lugar a estos episodios:
- La llegada de una masa de aire anómalamente cálida en un periodo ya de por sí cálido según la climatología.
- El recalentamiento de una masa de aire sobre una superficie continental.
- La subsidencia de masas de aire sobre un territorio, lo que supone un calentamiento adiabático de esa masa de aire.
Consecuencias de una ola de calor
Una ola de calor puede tener impacto en todos los ámbitos cuando afecta a una región: puede producir daños agrícolas, repercutir en el estado de los ecosistemas, generar pérdidas económicas y empeorar la salud de la población afectada y, en los casos más extremos, puede provocar muertes.
Olas de calor en España y cambio climático
La ola de calor más larga registrada desde el año 1975 en nuestro país fue la del 27 de junio al 22 de julio de 2015 que duró 26 días consecutivos. La segunda. La segunda ola de calor de 2022 comenzó el 9 de julio y duró 18 días, coronándose como la segunda más larga justo después de la de 2015. Además de larga, se declaró como la de mayor intensidad en España, con una anomalía positiva de 4.1ºC y afectó a 40 provincias
Le siguen en cuanto a larga duración la que se produjo entre el 30 de julio y el 14 de agosto de 2003, con 16 días y la tercera ola de calor del verano 2022 entre el 30 de julio y el 15 de agosto.
En total en 2022 contamos con 3 olas de calor, la primera de ellas comenzó el 11 de junio que fue de las más tempranas que se conocen, igualando a la de 1981. Duró 8 días y afectó a 38 provincias y fue la tercera de mayor extensión desde que hay registros.
Los datos de las últimas décadas muestran que los veranos son más largos cada vez en España y que las olas de calor se están haciendo más largas, intensas y frecuentes. Las proyecciones climáticas en todos los escenarios nos indican que seguirán produciéndose olas de calor, con más frecuencia e intensidad que en la actualidad.
Según un informe de la Agencia Estatal de Meteorología y que sigue la línea de los informes del IPCC, la frecuencia de ocurrencia de estos fenómenos es 10 veces superior que a principios de siglo.